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martes, 7 de septiembre de 2010

Sabés lo que te llevás al estómago?





Aspartame

El aspartame es una neurotoxina compuesta por 3 ingredientes: ácido aspártico, fenilalanina y metanol, fabricado por Monsanto y se comercializa como Nutrasweet, Equal y Spoonful y otras marcas más, que destruye el sistema nervioso central.

Sería conveniente que observáramos con atención los ingredientes de productos “light” o “diet” (aquí incluimos las Coca - Cola Zero, las O2 de Pepsi, etc.), los que dicen en su etiqueta “sin azúcar” o “no necesitan azúcar” y los de bebidas energizantes (Ej.: Gatorade). Al dejarlos de consumir en un lapso de 60 a 90 días, se podrían ver las diferencias en cuanto a los síntomas provocados por sus productos. Asimismo, el aspartame también viene incluido en productos que no son de dieta, tales como las gelatinas, yoghurts, medicinas, polvos para preparar bebidas (Tang, Clight, etc.), suplementos alimenticios (Natural-fit, etc.), aguas bajas en calorías (Be-light, etc.) chicles (Beldent, Trident, etc.).

Este producto causa un daño silencioso y lento en aquéllos que no muestran una reacción inmediata y que, por lo tanto, no evitan su consumo. Puede tomar 1, 10 ó 40 años para causar efectos tanto reversibles como irreversibles en la salud. Muchas reacciones al aspartame son muy serias (incluyendo ataques apopléticos y muerte), tales como los que podemos leer en esta extensa lista: ardor al orinar, impotencia y problemas sexuales, ardor en los ojos o garganta, insomnio, artritis, irritabilidad, asma, laringitis, ataques apopléticos y convulsiones, latidos rápidos del corazón, ataques de ansiedad, marcados cambios en la personalidad, ataques de pánico, mareos, aumento de peso, memoria deficiente, cambios o problemas en la menstruación, muerte, comezón, náuseas o vómito, reacciones alérgicas, depresión, diarrea, pérdida de cabello, dificultad al respirar, pérdida de la audición, dificultad de concentración, Lupus sistemático (enfermedad autoinmune crónica que afecta al tejido conjuntivo), pérdida de memoria, problemas en los niveles de azúcar en la sangre (Hipoglucemia o Hiperglicemia), disminución de la visión, reacciones asmáticas, dolor abdominal, rubor o enrojecimiento de cara, dolor al tragar, dolores de cabeza y migrañas, dolores de pecho, dolores en las articulaciones, susceptibilidad a las infecciones, entumecimiento o calambres en extremidades, taquicardia, erupciones, temblores en el cuerpo, espasmos en los músculos, tinnitus (zumbido o ruido en oídos), excesiva hambre o sed, tos crónica, tumores en el cerebro (probados en estudios hechos en animales), fatiga crónica, urticaria, verborrea (hablar mucho), hinchazón, edema (retención de líquidos), vértigo, hipertensión (presión arterial alta).

Como si fuera poco, el químico empeora las siguientes enfermedades: Fibromialgia, Artitris, Esclerosis Múltiple (MS), Enfermedad de Parkinson, Lupus, Sensibilidad Química Múltiple (MCS), Diabetes, Epilepsia, Alzheimer, Defectos de nacimiento, Síndrome de Fatiga Crónica, Linfoma, Transtorno del Déficit de Atención, Transtorno de Pánico (Fobias), Depresión (y otros desórdenes psicológicos).

Silicon

La comida rápida como los McNuggets de la multinacional McDonald's, contienen químicos conservantes TBHQ , butilhidroquinona terciario, un producto derivado del petróleo. También contienen "el antiespumante " dimetilpolisiloxano (Silicon), que es una forma de silicona que también se utiliza en cosméticos. Además, este último, aparte de encontrarlos en los McNuggets, lo contienen varias comidas congeladas. Estos productos hacen que los ''alimentos'' absorban más aceite y gasa.

Específicamente, el TBHQ es un conservante de los aceites vegetales y grasas animales . Un gramo puede causar náuseas , vómitos , zumbido en los oídos, delirio, sensaciones de asfixia y colapso, según el "Diccionario de un consumidor de los aditivos alimentarios''.

Fluoruro de sodio

El fluoruro es una sustancia tóxica. Si se ingiere en grandes cantidades o de forma prolongada, puede desencadenar signos y síntomas de variada índole. Entre los más ''suaves'', se pueden contar alteraciones en huesos y dientes y de lo más grave: la muerte.

La toxicidad aguda, se da ante la ingesta de grandes cantidades de fluoruro y puede ocasionar la muerte. Signos y síntomas: náuseas, vómitos, dolor abdominal, ocasionalmente aumento de salivación (sialorrea), lagrimeo, diarrea, dolor de cabeza, sudoración fría y convulsiones. Si el cuadro progresa puede dar debilidad, espasmos musculares, tetania. El centro respiratorio se deprime, se desarrolla acidosis respiratoria y arritmias cardiacas seguidas de estado de coma y muerte.

Otro tipo de toxicidad es la crónica y se refiere a la acumulación de fluoruros en los órganos y tejidos de nuestro organismo debido a la exposición prolongada de fluoruro en el tiempo. Es mucho más frecuente que la anterior. Ante una sobre exposición con fluoruro se produce fluorosis dental seguida de fluorosis esquelética.

La primera se da normalmente por la ingesta de agua con alta cantidad de flúor (mayor a 2 mg/litro-2 ppm) durante el período de desarrollo dentario, previo a la erupción del 1 molar permanente, generalmente antes de los 8 años de edad. Una vez que el esmalte del diente ha madurado deja de ser susceptible. Es decir, el riesgo de fluororis finaliza alrededor de los 8 años. Se caracteriza (según el avance de la enfermedad) por: líneas delgadas blancas en la superficie dental, confluencia de las áreas afectadas dando un diente blanquecino opaco (tiza), pigmentaciones marrones difusas, irregularidades del esmalte (porosidades), alta fragilidad del diente a la exploración y masticación

En tanto la fluorosis esquelética, se da por al ingesta excesiva de fluoruro de al menos 10 a 25 mg/día por 10 años o más lo que trae consecuencias a nivel óseo. Ésto provoca: Aumento anormal de la densidad ósea (osteosclerosis), calcificaciones en ligamentos y tendones, exostosis (formación ósea normal que sobresale de la superficie del hueso), entumecimiento y dolor en las articulaciones, inmovilidad, hipercalcificación de vértebras dando complicaciones neurológicas por compresión de nervios (médula espinal), cáncer de huesos.

También provoca efectos tóxicos en otros órganos tales como el riñón y sistema endocrino. En el primer caso, agrava las alteraciones que ya existen. La insuficiencia renal produce retención de fluoruros. Al existir una ingesta excesiva se produce un aumento de la concentración de fluoruros en los tejidos. En el segundo, se provocan alteraciones en las glándulas tiroides y paratiroides (modificaciones en el metabolismo de calcio y fósforo).

A lo expuesto anteriormente habría que sumarle lo siguiente: reducción del cociente intelectual y esterilidad o deficiencia de fertilidad.

Las principales fuentes de fluor son: aguas fluoradas (contienen entre 0.7 - 1.2 miligramos (mg) de fluoruros por litro o 0.7-1.2 ppm-partes por millón); Té (ya preparado, 1 a 6 mg/litro); gelatinas; pollo; leche fluorada (0.1 a 0.2 mg/litro); sal fluorada; alimentos y bebidas preparados con aguas fluoradas; productos dentales; suplementos de flúor.

Transgénicos

La ingeniería genética puede afectar la seguridad de los alimentos fundamentalmente de dos maneras: la alteración o inestabilidad de los genes puede hacer que las plantas produzcan nuevas toxinas y las proteínas que produce el gen extraño puede ocasionar alergias o toxicidad.

Hasta el momento se ha constatado los siguientes efectos sobre la salud:

- Aparición de nuevas alergias por introducción de nuevas proteínas en los alimentos. En EE.UU., en el conocido caso del "Maíz Starlink" (2000) se encontraron en la cadena alimentaria trazas de un maíz transgénico no autorizado para consumo humano que provocó graves problemas de reacciones alérgicas.

- Aparición de resistencias a antibióticos en bacterias patógenas para la sociedad (en algunos OMG se utilizan genes antibióticos como marcadores). Es decir, algunos transgénicos pueden transferir a las bacterias la resistencia a determinados antibióticos que se utilizan para luchar contra enfermedades tanto humanas como animales (por ejemplo, a la amoxicilina).

- Aparición de nuevos tóxicos en los alimentos (debido a los cultivos Bt o a las proteínas que se utilizan como marcadores en los OMG).

- Incremento de la contaminación en los alimentos por un mayor uso de productos químicos en la agricultura.

- Disminución en la capacidad de fertilidad. Según un estudio hecho público por el gobierno austriaco, la fertilidad de los ratones alimentados con maíz modificado genéticamente se vio seriamente dañada, con una descendencia menor que los ratones alimentados con maíz convencional. Otro estudio científico se añade a una larga lista de estudios independientes sobre los impactos ambientales y los riesgos para la salud de los productos transgénicos, que de forma reiterada son ignorados.

- Un nuevo estudio realizado por científicos franceses de las universidades de Caen y Rouen sobre tres variedades de maíz modificado genéticamente, muestra claras evidencias de riesgos para la salud. Se trata del maíz MON 810 (propiedad de Monsanto), y otros dos maíces autorizados para alimentación humana y animal. Al analizar los datos, los científicos han encontrado evidencias claras de riesgos para la salud en parámetros sanguíneos asociados con las funciones renales y hepáticas. Los cambios observados con los tres maíces transgénicos siguen patrones típicos de disrupciones en el sistema metabólico. El equipo también critica duramente la forma en la que los datos fueron analizados por Monsanto, sin cumplir los estándares estadísticos internacionales ni los estándares para ensayos alimentarios.

- En estudios hechos también con ratas, esta vez alimentadas con algodón transgénico, al consumirlo por un periodo de tiempo, murieron. Otros estudios han comprobado que las plantaciones de estos organismos genéticamente modificados, están matando a las abejas obreras y a las mariposas Monarcas.

- La rBGH, es una hormona de crecimiento genético de Monsanto, para inyectar en vacas lecheras. Según el Dr. Samuel Epstein de la University of Chicago, “induce trasformaciones malignas en las células epiteliales de los pechos”. Estudios con ratas confirmaron la sospecha y demostraron daños de órganos internos por ingestión de rBGH. Se ha comprobado que dicha hormona provoca cáncer, especialmente de mamas, próstata y colon. Existe el argumento de que el rBGH es destruído por pasteurización, pero en la investigación efectuada por dos científicos de Monsanto, Ted Elasser y Brian McBride, sólo el 19 % de la hormona fue destruída a pesar de hervir la leche durante 30 minutos, cuando la pasteurización normal es de 30 segundos. Canadá, la Unión Europea, Australia y Nueva Zelanda han prohibido la hormona rBGH. El Código Alimentario UN, un standard de salud internacional del ambiente humano, rehuso certificar rBGH como seguro. No obstante, Monsanto continuó vendiendo este producto en los Estados Unidos.

- Según el investigador Sharyn Martin, un número de enfermedades autoinmunes se ven acrecentadas por los fragmentos de ADN extraños que no son totalmente digeridos en el estómago humano e intestinos. Los fragmentos de ADN son absorbidos en la corriente sanguínea y potencialmente mezclados con el ADN normal. Las consecuencias genéticas son imprevisibles y se han hallado inesperados fragmentos génicos en cosechas de soja transgénica.

En nuestra publicación del 22 de octubre de 2009 ''Las 52 razones para luchar en contra de los transgénicos!!!'', pueden ampliar sobre ellos y las enfermedades que traen aparejadas.

Glutamato Monosódico

Es un aditivo utilizado para dar más sabor a los alimentos industrializados, como caldos en cubitos, salsas, frituras, cubos de jitomate y sopas instantáneas. En los años 60´s se popularizó un sazonador de marca Ajinomoto, que se usaba como sal en todos los alimentos. Fue retirado del mercado al descubrir que era altamente cancerígeno; era glutamato monosódico puro. A partir de ese momento, las industriales ''alimenticias'' lo empezaron a usar combinado con otros aditivos para condimentar los ''alimentos''.

En los restaurantes de comida china o japonesa descubrieron que algunos clientes empezaron a sufrir diversos trastornos que les afectaban la salud, lo que se dio a conocer el síndrome del restaurante chino y consistía en dolores de cabeza, irritación en los ojos, visión borrosa, taquicardia, sudoración excesiva, comezón generalizada, diarreas y asma, entre otros síntomas.

Los estudios médicos arrojaron que el glutamato monosódico tenía un efecto tóxico en las células nerviosas y que favorecía la obesidad y la esterilidad y en algunos casos, encontraron que el químico favorecía la aparición de células cancerígenas.

En resumen, este químico favorece a la aparición de enfermedades como el cáncer, asma, obesidad; además de provocar dolores de cabeza, diarreas, esterilidad, irritación en los ojos, etc. Todo esto, suponiendo que los ''alimentos'' que lo contienen (Ej. sopas instantáneas) se calientan al fuego, sacándolas de sus envases plásticos y colocándolas en ollas o sartenes de metal o barro. Pero aún hay más: al calentar la sopa (para economizar tiempo) en su envase de polietileno y en horno de microondas, el plástico del envase suelta dioxinas, es decir, toxinas que por naturaleza provocan cáncer.

Por si todo esto fuera poco, existe un peligro más para tener en cuenta. Discovery Health (canal canadiense que brinda información educacional sobre la salud) realizó un informe especial dedicado a las sopas instantáneas, señalando que al ser de una digestión muy lenta, se quedan en los intestinos hasta por varios días, lo que provoca en algunos consumidores, apendicitis.

Conservantes

Los conservantes que se aplican en los productos envasados no son naturales, todos ellos son perjudiciales para la salud y se almacenan en nuestro organismo. En pequeñas cantidades no traen dificultades, pero con el paso del tiempo, pueden resultar cancerígenas y causan problemas hepáticos y renales.

Plomo

Los ''alimentos'' y bebidas contenidos en envases de aluminio, almacenan residuos. Por lo general, la lata y la tapa suelen ser de aluminio y el cierre que bordea la tapa, es sellado con plomo. Si bien la cantidad de plomo que contienen dichos enlatados es mínima, éste se va acumulando con el paso de los años y puede ser causal de esterilidad, alteraciones renales, problemas gástricos, entre otras afecciones. Además, puede causar efectos secundarios en el desarrollo neurológico de los niños.

BPA

Está presente en las botellas plásticas que todos usamos para beber agua. Esta sustancia es también usada en los recipientes de algunas sodas, alimentos y fórmula para bebés. El BPA, que es una hormona que altera la química del organismo, ha sido vinculada a anormalidades en los genitales, pubertad temprana, cáncer, diabetes de tipo 2, obesidad y problemas de fertilidad en numerosos estudios.

Reducción de la población mundial

Algunas personas, como Alex Jones (video), nos dicen que todos estos productos en los alimentos no son más que un método de reducción de la población mundial y para demostrarlo pone el ejemplo de las palabras de Ted Turner quien dice que los seres humanos somos devoradores y alimentadores inútilies, a lo que agrega que tienen que matar al 80% de nosotros. A esto deberíamos agregarle las palabras de Allan Greg, de la Fundación Rockeffeler: ''La superpoblación es un cáncer, nunca he oído que un cáncer se curara alimentándolo''.

Es muy posible que la parte de la frase de Turner ''devoradores y alimentadores inútiles'', no esté muy alejada de una gran porción de la población mundial, ya que muchas personas no se preocupan por conocer las sustancias que contienen los alimentos que consumen. Es decir, no deberíamos esperar que así como las propagandas nos dicen (de manera ''digerida'' y falsa) ''consuma este alimento rico en...'' o ''los transgénicos son la solución para el hambre en el mundo'', etc., nos hablen de las contraindicaciones de los productos, ya que su principal objetivo es vender. Sea o no la reducción de la población mundial el fin último, no deberíamos ser tan ciegos y leer el contenido de dichos ''alimentos'', informarnos de lo que comemos, si es sano o no, etc. y conocer las alternativas que existen para una alimentación más natural y menos perjudicial para la salud humana. Para esto último pueden leer en ''soberanía alimentaria'', dentro de los temas en que se halla dividido el blog.

Estos químicos y los transgénicos, son apenas una pequeña porción de las alteraciones producidas en productos llamados ''alimenticios'' (basta con leer donde dice ''ingredientes'' en varios envases y nos daremos cuenta de ello) y los perjuicios que acarrean al ser humano; sin contar los efectos producidos por la fertilización en las plantas, las vacunas ''preventivas'' de enfermedades en animales, el mercurio en pastas dentales, entre otras consideraciones que podrían tenerse en cuenta. Los hemos expuesto en esta publicación porque son de los más relevantes y agresivos y como una forma de acercarnos a todo este cúmulo de sustancias que nos llevamos dentro de nuestro organismo y que tanto nos perjudican. La conciencia que debemos tomar de esto no es individual, deberíamos ampliarla a la mayor cantidad de personas que podamos y de esta forma comenzar a combatir nuestras enfermedades e inclusive nuestra muerte.

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