No los calla nadie!!!

La radio comunitaria garífuna Faluma Bimetu (Coco Dulce), de la comunidad hondureña de Triunfo de la Cruz, está nuevamente en el aire. La radio había suspendido temporalmente sus trasmisiones en enero de este año, debido al acoso que sufrían sus integrantes y a la amenaza que recaía sobre las instalaciones de la emisora (ver: La información incómoda la sacan del aire [20/01/11]).

Anteriormente la radio ya había sufrido un atentado, cuando en enero de 2010 fue incendiada por desconocidos, en un hecho que hasta ahora permanece sin esclarecer por las autoridades. En aquella oportunidad, las pérdidas materiales que ocasionó el incendio hicieron que Faluma Bimetu estuviera fuera del aire durante un mes, tras lo cual pudo regresar a sus emisiones gracias a los apoyos que recibió para su reconstrucción.

En esta año, la radio había suspendido sus transmisiones por temor a sufrir otro incendio, a lo que se sumó que el pasado 14 de enero, el líder comunitario y conductor de la emisora, Alfredo López, tuvo que comparecer ante la justicia por un tiroteo ocurrido en Triunfo de la Cruz. Si bien no se le imputó ningún cargo (porque no había hecho nada), los comunicadores de Faluma Bimetu temieron que ese hecho pudiera generar represalias contra la emisora.

En sus más de diez años al aire, la radio comunitaria ha sufrido diversos agravios debido a que ha sido una voz activa en la denuncia de los intereses de los empresarios turísticos de Triunfo de la Cruz y la Municipalidad de Tela, ya que pretenden realizar ventas ilegales de tierras comunitarias para promover megaproyectos turísticos en la Bahía de Tela.

Ante la reanudación de las emisiones, la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) y Reporteros sin Fronteras (RSF) exigieron a las autoridades hondureñas que garanticen la protección de los medios de comunicación de las minorías, responsabilizándolas por todo acto de censura o sabotaje que afecte a la radio Faluma Bimetu.

“La suerte de la comunidad de Triunfo de la Cruz y de su radio resume la triste conjunción de los tipos de violencia que minan actualmente el país: la de las autoridades locales en colusión con la oligarquía agraria e industrial; la del crimen organizado, especialmente presente en esta región atlántica, donde un periodista perdió la vida en 2010, uno de los diez asesinados durante el año; la de la represión que nació tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, que se dirigió sobre todo a los medios de comunicación minoritarios y a sus representantes”, resume el comunicado de AMARC y RSF.