El fastuoso Congreso de la Nación Argentina, enclavado en plena Capital Federal cambió de aspecto en el mediodía de este martes 19 de abril con la presencia de una feria campesina, los rojos de las banderas del Movimiento Nacional Campesino Indígena (MNCI) y el verde de los símbolos que identifican a La Vía Campesina Internacional.
Es que el MNCI culminaba una semana de actividades en varias provincias argentinas motivadas por la rememoración del Día Internacional de la Lucha Campesina llegándose hasta el corazón porteño para presentar públicamente ante los legisladores su proyecto de ley que busca declarar una moratoria a los desalojos de las familias campesinas.
La conservación de los productos, saberes y culturas que formaron parte de dicha feria es posible, señala el MNCI, gracias al ininterrumpido proceso de resistencia al avance del capital sobre los territorios campesinos, motorizado por agronegocios como el sojero y forestal, así como a la explosión minera.
“A partir de la organización de base, resistimos y luchamos por un modelo basado en la Soberanía Alimentaria y en la reforma agraria integral, no solo para nuestros territorios sino que entendemos, deben ser asumidos para toda la sociedad”, explican desde el MNCI.
El proyecto que sería presentado ante los legisladores representa un escudo contra las decisiones judiciales que, por regla general, han beneficiado al capital antes que a los derechos de las comunidades. “Esto no quiere decir que si no se aprueba este proyecto dejemos de resistir y seguir la lucha como lo venimos haciendo desde hace veinte años”, dijo desde las inmediaciones del Congreso Cristina Loaiz, del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE).
La coyuntura electoral que se vive en Argentina, cuyo gobierno (que va por su ratificación), cabe destacar, se ha enfrentado duramente con las corporaciones de terratenientes dedicados al monocultivo de soja transgénica, parece abrir una brecha para que las siempre olvidadas voces del campesinado tengan finalmente eco.
El integrante del Movimiento Campesino de Córdoba, Alberto Salas, destaca por su parte que lo que está condensado en el proyecto de ley se basa en la sistematización de muchos años de experiencia en la resistencia concreta. “Queremos hacerle ver a los legisladores que el futuro argentino está en la producción campesina y para ello se necesita poner freno a los desalojos”, dijo Alberto . Los casos de desalojos dan lugar, agrega, a “negocios sucios” en que intervienen estudios jurídicos y especuladores con tierras. Y donde los jueces aplican “la ley sin tener en cuenta que se trata de un problema político”.
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