''Déjala decidir''

Perú tiene la tasa más alta de denuncias por violación en América del Sur y lo más dramático es que 34 % de las niñas y adolescentes víctimas de una violación sexual resultan embarazadas, dijo María Elena Reyes, integrante de la Articulación Feminista, colectivo que viene impulsando la campaña por la despenalización del aborto en casos de violación sexual "Déjala decidir".

Reyes afirmó que la campaña, iniciada en setiembre de 2012, ha logrado recabar 60.000 firmas de respaldo a la iniciativa ciudadana acerca del derecho a decidir la interrupción del embarazo en caso de violación y será presentada ante el Congreso de la República a fin que sea debatida en el pleno. "La campaña ’Déjala decidir’ no promueve el aborto, sino el derecho de las mujeres a decidir, en un país donde una de cada cinco mujeres ha sufrido violación sexual antes de los 15 años por una persona cercana a su entorno familiar. Las estadísticas son dramáticas: nueve de cada 10 embarazos de niñas menores de 15 años son producto de incesto", explicó.

La Articulación Feminista presentó el avance de la campaña el 28 de mayo, "Día internacional de Acción por la Salud de la Mujer". Las congresistas Verónika Mendoza y Rosa Mavila, presidenta de la Mesa de Mujeres Parlamentarias; Miguel Gutiérrez, representante del Colegio Médico del Perú y Rosa Ojeda, vice presidenta de la Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú (FEMUCARINAP) expresaron públicamente su respaldo a la campaña.

La congresista Mendoza dijo que se adhería a la campaña "porque estamos frente a una situación muy preocupante y dramática ante la cual no podemos cerrar los ojos. No podemos mantener una legislación que le da la espalda a miles de mujeres adultas, niñas y adolescentes, sobre todo cuando constatamos que la penalización del aborto, en el caso de violación sexual, no ha sido eficaz". Señaló que la penalización del aborto no ha impedido que las mujeres se sometan a abortos clandestinos inseguros y las más afectadas "principalmente, son las mujeres más pobres, lo que genera una situación de discriminación frente a otras mujeres más pudientes que, seguramente, pueden practicarse un aborto en una clínica", agregó. 

"Esta campaña es larga, dura. No es una campaña de coyuntura, vamos a enfrentarnos a contradicciones fuertes con sectores que tienen poder mediático y político y por eso la organización de las mujeres tendrá que levantar muy alto el contenido y valor de esta campaña", dijo la congresista Mavila, quien a su vez recordó que, desde hace muchos años, el movimiento de mujeres viene exigiendo el respeto a su derecho a decidir, que se apruebe el protocolo del aborto terapéutico legal en el Perú desde 1924 y, actualmente, el derecho a abortar en caso de violación sexual. "¿Es deber de una mujer ser madre después de haber sido violada? Según la doctrina penal, estaríamos ante un acto supererogatorio, es decir, que va más allá del deber y no se puede exigir o imponer a una víctima de violación que sea madre", indicó.

Por su parte, Miguel Gutiérrez señaló que el Colegio Médico considera que los legisladores deberían modificar la ley y considerar el aborto en casos de violencia sexual. "De ninguna manera puede pensarse que esta ley promueva el aborto; apoyamos la campaña porque promovemos el respeto a la mujer, los derechos sexuales y reproductivos. Es importante que se aborde el tema de la violencia sexual y sus consecuencias en un marco ético y de respeto a la dignidad de la persona", afirmó.

La Articulación Feminista agrupa al Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, el Movimiento Manuela Ramos, Estudio de Defensa de la Mujer (DEMUS), Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos (PROMSEX), Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM) Perú y a Católicas por el Derecho a Decidir.